Fragmento breve (Del capítulo 1 de novela inédita)
Del capítulo 1 de novela inédita
Por Luisfelipe Minhero
Según mis cuentas alegres, este fragmento que por mi incontinencia publicadora ineludible lo doy a conocer sin más, pues ya no aguanté que continuara inédita al 100% la novela de la que forma parte y que pienso publicar en 2024 o 2025.
Y me surgió una gran
motivación. Reiterar mi gran respeto y absoluta admiración al Comandante en
Jefe Fidel, en ocasión del 97 aniversario de su nacimiento el recién pasado
13 de agosto. Podrá parecer contradictorio, por lo que digo en el
fragmento novelístico, pero Cuba es el país en el mundo donde su sistema de
salud (logro de la Revolución cuyo principal gestor es Fidel) escucha a
los pacientes y les enseñan a los pacientes a escuchase a sí mismos. La
acepción de pacientes que aludo es la que se deriva del griego πάθος, o
sea, pathos, que si bien puede tener varias acepciones, la más
apropiada es la de sufrimiento. Es que me refiero al sufrimiento nada
subjetivo, que brilla al menos en el sistema de salud acá, en el país(ito),
sobre todo en el nacional o público.
Por lo mismo, el texto que reproduzco es un fragmento con evidente contenido
histórico y político, sustentado en nuestra realidad, que no deja de ser
controversial y discutible, pero también aceptable y honesto.
A quienes me hagan llegar sus comentarios escritos, bien a mi blog o bien
a mi féisbuc, les quedaré por siempre agradecido.
Autor
Independiente Salvadoreño.
✊🏿✌🏿⚒🛠✌🏽✊🏽
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Blog: luisfelipeminhero.blogspot.com
Breve fragmento de una novela inédita de mi autoría.
¡¡¡El suicidio, llegará para
mí su oportunidad, su ocasión, su momento pues!!! Para empezar debe ser un Arte,
para nada melodramático ni sensiblero y… yo me considero un artista algo dramático
y con sensibilidad social. Pero además… el suicidio debe ser una reivindicación
política para toda persona mayor de 30 años. De tal modo que quien quiera
disponer de su Vida a su albedrío, lo pueda ejercer con dignidad y completa
libertad. Total la Vida es el único bien que nos pertenece en la vida y… de manera
individual y personal a cada quien y... para el caso no tiene la menor
importancia que haya nacido en un parto múltiple y por lo mismo pueda considerar
compartida como bien común.
En la miserable avaricia del capitalismo, en
definitiva me parece una decisión valiente y digna, siempre y cuando no sea
para eludir la realidad y la verdad. Amén de una sólida demostración de discrepancia
antagónica con el sistema de valores o ¿antivalores? que propugna el capitalismo.
En la guerra en Vietnam tuvo intensas y abundantes expresiones con los
monjes budistas que se inmolaban prendiéndose fuego en protesta por la intervención,
en su país, del imperialismo yanqui y sus aliados.
Yo lo intenté durante más de 20 años con el pretexto de gestionar la
insurgencia armada en el país(ito) cacorro y guerrear por breves momentos en
otros países tropicales. Presiento que ya perdí la oportunidad y a mi edad, más
sería un acto de equilibrio cósmico o ¿cómico? y sin princesa Micomicona de testigo
acompañante. A mi parecer, la edad ideal para suicidarse anda entre los 33 y 47
años de edad cronológica.
Aun así hay una larga nómina de escritores geniales que optaron por el
suicidio y me parece que sólo para resolver el último y
definitivo arcano, ese que la Vida intensamente vivida, ofrece como su
grande y antagónica contradicción, aunque sea la última: la Muerte. Por
cierto el corolario digno de una Vida creativa.
Quizás algo muy parecido a un viaje a Marte, sin regreso hoy por hoy,
dada las condiciones impuestas por los limitados recursos energéticos para
impulsar largos viajes más allá de la atmósfera terrestre.
Recursos que la humanidad ha logrado concebir, con los que apenas impulsan
artefactos para esos viajes a no más de 100,000 kilómetros por hora (kph).
Y las distancias astronómicas eso son y se miden en años luz, donde ni se
atisba la presencia de un dios creador.
Como casi todo el mundo sabe, la luz viaja a 300,000 kilómetros por
segundo (kps)... o sea 18,000,000 kilómetros por minuto (kpm),
igual a 1,080,000,000 kph. No obstante la luz del Sol, la estrella de nuestro
sistema planetario, tarda en llegar a la Tierra unos breves 8 minutos, lo que
yo me demoro en llegar desde casa al Café de Especialidad del matrimonio Rivera/Rodríguez,
una pareja -casada por la ley, por la iglesia y como dios manda y el cielo ordena-
es decir heterosexual, hembra y varón.
Para gozar la Vida, siempre pródiga, con los pródigos y agradecidos, en
el Café gozamos con cafés preparados a partir de variedades procedentes del “Coffea
Arábica” como Geisha, Kenia, Pacamara, Pacas y otras… tostados y molidos sus
granos oro, según el método de preparación seleccionado para realizar la infusión
anhelada: express, moka, aero-press, bistro…
Considero y sin ningún recato que, la bebida oficial y además preferida
de los escritores que pendemos de resolver (como demiurgos) el último y
definitivo arcano de la Vida es el café.
Imagino debe ser a causa de las 3 principales característica que le
otorga su principal componente la cafeína (una metilxantina) que mejora el rendimiento físico, estimula el sistema nervioso central
y es diurético (no más que el agua).
En particular la cafeína del café
mejora: el estado de alerta, la atención y la memoria incluso cuando hay deterioro
cognitivo debido a alguna enfermedad subyacente.
En tanto el consumo sistemático de café se asocia, con frecuencia a una
menor incidencia de la enfermedad de Parkinson y a la enfermedad de Alzheimer.
Con todo lo mencionado, no sé exactamente por qué, pero estimo viene al
caso nombrar, de entre muchos escritores que optaron por el suicidio y que lo
consiguieron con la alegría de resolver un enigma vital, aunque la Muerte
y la Vida nomás permiten un intento. Nombraré para empezar a: Anne
Sexton, Ernest Hemingway, Sylvia Plath, Virginia Woolf...
Yo estoy consciente a plenitud que en varias oportunidades, la Muerte
me hizo muecas. En un charral del cantón Sumpul Chacones en Chalatenango, por ejemplo.
En ocasión del asalto perpetrado por el DM-2 del enemigo, el lunes 16 de junio
de 1986 a eso de las 1700 horas, contra el campamento, donde se ubicaba la CP
de la RN/FARN, desde hacía más 2 meses continuos, a propósito de
su pleno anual. En tan sospechoso asalto, heroicamente, es decir dándose verga,
fueron muertos Salvador “Chito” Silis (Comandante Santiago Ramírez)
partido por los disparos en ráfaga de una ametralladora punto 30 (0.30) y
Óscar Acevedo (Comandante Andrés) por la onda expansiva de una granada
fragmentaria de infantería lanzada por la tropa enemiga y que le explotó en los
pies.
El intento inicial de retirada fue bastante desordenado, más bien
desvergue total, dada quizás la prioridad de eludir lo más posible la refriega directa
con el destacamento enemigo, puesto que su tropa con armas largas de infantería
y algunas de artillería, nos superaba en una (des) proporción numérica de 1 a
10 hombres.
En la guinda inicial yo quedé situado en medio de los 2 compañeros muertos.
No sé ni cómo, entre las armas de artillería logré reconocer esa ametralladora
pesada 0.30, apostada medio escondida, a la vuelta del primer recodo de
la ÚNICA ruta de retirada prevista y dada a conocer, por la Sección-2 Seguridad
y Contrainteligencia (S2) del campamento de la poderosa Comisión Política
(CP) de la Resistencia Nacional/Fuerzas Armadas de la Resistencia
Nacional (RN/FARN), en cuyo pleno anual se reunirían sus 10 miembros
propietarios y sus 5 suplentes.
En ese momento NO concurrían en el pleno: Eduardo Sancho (Cmte.
Fermán Cienfuegos) que aun venía del extranjero y Eugenio Chicas (Cmte.
Marquitos Jiménez) que desde el día anterior había asumido como misión oficiosa,
irlo a encontrar en los alrededores de la cooperativa agrícola “Los Apoyos” situada
en el departamento de Santa Ana, entre Texistepeque y Sumpul Chacones.
Así la retirada se convirtió en un gran desvergue de “sálvese quien
pueda”, pero otros 3 camaradas y yo, logramos juntarnos: Bruno, Rafa
Copapayo, el Comandante Iván (José Luis Quan) y yo. Luego de verificar que
no se veían otros compañeros, de inmediato decidimos continuar la guinda, sobre
terrenos poco conocidos y muy escabrosos.
Durante 4 días estuvimos sin comer entre bellos y frescos pinares, pero
cuyos frutos parecen piñitas, aunque son incomibles por tóxicas. Lo de beber
agua fue resuelto por los varios riachuelos cristalinos que fuimos encontrando en
el caminar.
Según supe, por el radito donde con audífonos escuchaba la Radio
Venceremos, al día siguiente del ataque armado los 4 fuimos declarados
desaparecidos en combate, probablemente muertos.
Cuando por fin, bastante avanzada la tarde del 4º día en guinda, logramos
llegar a un campamento guerrillero de las FPL. Por (buena) suerte Iván disponía
del santo y seña socializado y todavía vigente y nos recibieron sin desconfianza.
Ahí fuimos enterados de la muerte de Chito y Óscar, miembros de
la poderosa CP de la RN/FARN. Los encargados del solidario asentamiento
guerrillero, nos comentaron que nuestros compas sobrevivientes del asalto
enemigo, andaban en la inhumación de los restos de nuestros compañeros muertos,
que fueron 4 y no debían de tardar en regresar. No imaginaba quiénes podían ser
los otros 2.
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Luisfelipe Minhero.
Autor Independiente Salvadoreño.
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