Cosenos, obscenos, oscuros y tangenciales (Fragmentito ilustrativo de mi novela, próxima a salir)

 

Cosenos, obscenos, oscuros y tangenciales

Fragmentito ilustrativo de mi novela, próxima a salir

Luisfelipe Minhero

 

Parrafito de mi inédita novela “Cosenos, obscenos, oscuros y tangenciales” que en 2 meses (días más días menos) su versión en libro digital (eBook) se prevenderá en Amazon, con antelación a su lanzamiento internacional 2 o 3 meses después. Durante la preventa el eBook estará a un precio escandalosamente barato.

Este parrafito premonitorio, a mi modo de ver y escribir, da idea de como va mi novela, onceno (11) libro que publico y modestia aparte, con gozo y deleite, vivenciales.

Confío en la bondad de todos, para la adquisición de esta novela.

Atentamente,

Luisfelipe Minhero.

Autor Independiente Salvadoreño.

Página de Autor Central: amazon.com/author/luisfelipeminhero

Blog: luisfelipeminhero.blogspot.com

 

Carátula de las ediciones en papel y digital.

Foto Luisfelipe Minhero. Diseño Eva Rodríguez de Rivera.

 

 

Cosenos, obscenos, oscuros y tangenciales

Fragmentito ilustrativo de mi novela, próxima a salir.

Luisfelipe Minhero

Planes de Renderos, 1 de abril de 2021 – 23 de enero de 2022.

 

Pero... no es tu recuerdo que debo convocar... ni es de vos que debo hablar.

Es a mis 4 Divas con las que debo buscar concertaciones y acercamientos. De ellas aunque, a una por una, las separe el tiempo cronológico y la distancia geográfica... bastará que un vórtice espacio-temporal, originado en la cercana Alpha Centauri, junte a mis 4 Divas para que, en simultáneo cuarteto de cuerdas, brillen y deslumbren entre públicos selectos.

De ellas, de las Divas (mis Divas personales e iconos de la sustancialidad emulable) conservo hechos imaginados y otros no... ahorita ya no sé discernir cuáles (me refiero a los hechos) son qué, es decir cuáles inventé y cuáles esperan como agazapados a la vuelta del vórtice espacio-temporal... y me pregunto con la oportuna idea de no encontrar respuesta, si tendrá alguna significancia desentrañar la verdad amarga o el mito dulcemente alevoso en ellos (en los hechos)... ¿verdad o mito?, ¿misterio, oscuridad, duda?... no sé, pero... sí impulso vital, hálito poderoso, sortilegio que devino en divino...

De vos, amado, aprendí y aprehendí que, la Historia (con mayúscula inicial) es un buen sucedáneo del vórtice espacio-temporal, para juntar a mis 4 Divas en simultáneo fulgor.

 

Entonces, a mis 4 Divas me atan complejos hechos, propios de una época casi tribal y trivial, cuando el canibalismo capitalista globalizado, intentaba pintar con matices de nacional al país(ito) más alienado del mundo, más coprófago e insistente en pervivir entregado orgiásticamente a los degeneres dictados por el norte imperial, todavía a finales del siglo XX y en estos principios del siguiente.

Sí agradezco y no sé a quién, por cuanto sé que sos vos amado, el oportuno hecho que, mis indiscutibles y divinas 4 Divas, aparecieran en mis momentos de mayores agonías existenciales y por fin algo fuera conformando contundente, mi identidad y mi carácter, coadyuvando a mis papás y a mis mentoras salesianas del Colegio María Auxiliadora, lo reconozco...

 

Cierto es y no sólo para mí, que Maribel Arrieta me chinió siendo yo una cría recién destetada y cuando pasé a infanta que daba mis primeros pasos, mimosa me acunó en sus brazos; un encuentro final se dio a mis 4 años y ½ al llegar a cursar el primer año de un kínder todavía difuso, en el colegio de monjas salesianas, donde ella cursaba el último año del bachillerato en ciencias y letras, en el que yo seguí la misma saga de las privilegiadas niñas pequeño burguesas del país(ito) en el que me tocó nacer... a Maribel le resultaba una morenita bien despercudida y graciosa, con ojos verdes serenos como el lago Coatepeque, a más de bien hecha, casi a la perfección, por el sobresalto en la gloriosa cópula genital interrumpida tardíamente. Cuando papá tiene que salir emblemando la libertad por la que luchaba, con el simbólico acto de agitar al viento, con la mano izquierda, el calzoncillo blanco de algodón sanforizado, antes de saltar el tapial (al momento con la puerta cerrada con llave en el interior de la casa solariega) del patio, en realidad jardín de presunciones botánicas exóticas cultivadas y decorativas por lo pletórico de arbustos de gemelas, matas de cicas, parras de jazmines blancos y galanes de noche, setos de gardenias y rosas de Castilla y la infaltable fuente estilo andaluz en medio. Pasó así al traspatio encharralado donde profusos daban cosechas los caimitos, los mangos Manila, los limoneros, los zapotes, los nísperos, las guayabas peruleras y los aguacates amantequillados de Mazatenango, donde tomó un breve instante para vestirse nada más con el calzoncillo y cubrirse justo las partes reservadas a ser mostradas en la intimidad, llamadas vergüenzas por la jerarquía católica y su grey. Ya con el calzoncillo puesto, del traspatio saltó a las casas vecinas pasando por los tejados, tapiales y traspatios con la cautela más política e instintiva del mundo, a modo de no quebrar una tan sola teja de barro que dejara evidente reguero, señalando la ruta de la guinda de por sí heroica... eludiendo, una vez más, la captura y muerte ordenada por el tiranosauro de turno, el famoso ladino substancialmente aindiado y exóticamente cruel, que construyó casas baratas para algunos de los salvadoreños pobres, que quedaron después del ‘32... en su huida, llega al tálamo católicamente bendecido de la nueva amante en perspectiva, aventura que toda la vida papá conservó en el secreto de una relación clandestina, por respeto o lástima al esposo de la doña y a las reglas del amor galante. La morada de tal lecho estaba localizada en la misma manzana del hogar oficial, católicamente establecido con mamá.

La que desde esa noche de guinda impetuosa, se convirtió en discreta amante, con el esposo esa noche ausente, sin pedir explicaciones acoge a papá, vestido sólo con el calzoncillo, con la pasión y el agradecimiento de casada que, recién hubo descubierto él y... con él, los placeres del sexo con lujuria y al retenerlo para gozarlo en el marco de una morbosidad adicional, proporcionada por un peligro ignorado en sus detalles, aunque intuido a plenitud y… además le salva la vida. Fueron las prebendas, que le llegaron para quedarse, de la política ejercida con honestidad y vocación de servicio… sin duda fue una madrugada de intensos intercambios de fluidos corporales.

A ratos de haber culminado la agitada madrugada, cuando el esposo nomás llegando muy contento, de la breve ausencia desde el día anterior, establecida por la rutina de sus negocios, a media mañana del inmediato día de la exaltada noche pasada, queda muy impresionado, hasta el borde de la admiración, del coraje de papá y orgulloso que su esposa lo vistiera con ropa de él, ignorando obviamente las vicisitudes amatorias entre ellos... de modo que para alejarlo del inmediato peligro que significaba permanecer cerca del lugar de los hechos persecutorios, del intento de captura y demás secuelas, le ofrece ayuda para continuar alejándose de la jurisdicción del tiranosauro de turno, sacándolo a escondidas de casa, pero para ello... antes lo tiene que meter en el baúl del carro Ford recién comprado nuevito en la agencia cuya marca, según decía papá significaba que, eran de Fabricación ordinaria reparación diaria… bien arrinconado al fondo y cubierto con un toldo de gruesa lona que, disimulaba casi a la perfección, su presencia corpórea a la mirada de una inspección policiaca de rutina... la huida facilitada a papá, por tan solidario vecino, bajo el amparo de la honorabilidad de culto burgués, pundonoroso abogado y respetable terrateniente, fue pan comido.

En tan extraordinaria noche, papá engendró, con minutos de diferencia además de mí, otra niña de la que nunca se reconoció su paternidad, para dicha y orgullo de sus padres “legales”, salió rubia, colochita y con ojos azules y que a los 18 años también fue Miss El Salvador, como años antes fue Maribel.

¡Oh papá, pobre papá que murió muchos años después, auxiliado sin su voluntad ni deseo, con los sacramentos de la santa madre iglesia pero librepensador utópico y creyendo ser comunista del ’32, por culpa de la estulticia del déspota teósofo, entonces de turno en causar sufrimientos al país(ito) testarudamente feudal! Tal es el marco de recuerdos en que me aparece vívida Maribel Arrieta.

 

La semblanza de Lil, que en mí se enseñoreó con fijeza de voto a perpetuidad fue, la entornada en mi primera reunión clandestina colectiva, en un goyesco cuarto de un goyesco mesón, a poca distancia del Cementerio de los Ilustres, pero el aludido mesón goyesco, estaba ubicado en la colonia Ferrocarril del proletario y alegre barrio Santa Anita.

Toda esa atmósfera goyesca, en mi espíritu acomodado con cierto barroco aire tropical, dejó inquietudes desconocidas en una mente, entonces quizás más abierta que hoy, a los hallazgos de nuevas causas proletarias… vos compita, me dijo Lil, como con algo de exquisito detallismo proletarizado, escogé un seudónimo bonito, porque será tu “nom de guerre” oficial con el que nacés para toda tu vida de guerrillera urbana en este país(ito) de la jodarria y... a lo mejor si sobrevivís a esta etapa de la lucha, lo convirtás en tu nombre legal, pero ya como funcionaria del nuevo gobierno revolucionario, que será cosa de unos 5 años más de lucha. El optimismo “realista” nos desbordaba.

Ese hallazgo o reencuentro con Lil Milagro, se produjo en la ceremonia iniciática de incorporación a mi 1ª célula guerrillera del inicial y auténtico Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) que la prensa banal y venal nombró como “El Grupo” y en el que descubrí 2 cosas: la 1ª , nuevas liturgias ateas y revolucionarias y la 2ª , que la idea perforante de considerar tenebrosos, aviesos y adustos a los comunistas, se hicieran o no guerrilleros, era totalmente falsa y... que por cierto por mucho tiempo me auto engañé con idea tan absurda y reaccionaria... 3 años después, enquistado el inicial y auténtico ERP por una camarilla trotskista y militarista, acompañé a Lil en la fundación, por razones obvias e históricas, de la Resistencia Nacional/Fuerzas Armadas de la Resistencia Nacional (RN/FARN).

Lil desbordó conocimientos y me derribó estereotipos con una especie de humor iconoclasta y refinado, forjado en los rigores académicos de la facultad de derecho, en el estudio y aprehensión autodidacta de la ciencia y en la lucha diaria por la causa proletaria... y ese desborde fue desde la “inolvidable 1ª reunión” y disculpen el lugar común, que utilizo para decirlo, con la que entré a Reino Aventura. Humor satírico, elegante, con fragancia a Chanel que, nunca me di cuenta lo perdiera ni siquiera antes de una operación guerrillera (golpe de manos, emboscada, asalto) de por sí peligrosa pero, además complicada por la inexperiencia del comienzo... así, mi satanizada apreciación de los comunistas rodó y rodó, rodó y rodó y... quedó para siempre enterrada en el barranco de la entropía burguesa... y ya mis pendejadas de burguesita acelerada e inmediatista me dieron vergüenza... y al poco tiempo me valieron madre... con todo, sin duda que intentar subvertir el gran orden universal de la infamia en el país(ito), fue mi empresa más divertida por la incertidumbre proletaria y tropical que conlleva.

Pero las sorpresas procuradas por mi ingreso a la insurgencia revolucionaria, no paraban... y así, en una de las conversaciones amistosas, al término de las reuniones de estudio político de la célula guerrillera, no me acuerdo por qué, algo le dije acerca de Maribel Arrieta y para sorpresa mía me comentó que era su conocida y tal descubierta realidad dio para hablar más de ella, digo de Maribel, en otras oportunidades.

A Lil la vi por última vez, el miércoles previo al sábado de noviembre de 1976, cuando herida en desigual combate, esbirros criminales uniformados, la capturan inconsciente o más bien la secuestran, la desaparecen, la someten a condiciones infrahumanas propias de las cárceles clandestinas del régimen y la asesinan en octubre de 1979 sin hacerla aparecer, cuando otro golpe de estado asoló al país(ito) con estado de sitio y represiones políticas reencausadas contra las incipientes guerrillas. ¡Qué casualidad que en octubre de 1979, Lil y muchísimos desaparecidos a la fuerza y presos políticos clandestinos del régimen, fueron asesinados en el marco del golpe!... y esto que fue dado por un grupúsculo de militares dizque “progresistas”, comparación válida nomás con los chafarotes fascistas que desalojaban, pero… que les otorgan impunidad total por los crímenes cometidos y sanseacabó el progresismo, además, en previsión de su futuro en similares condiciones revanchistas de otros golpistas.

 

Por netos motivos de abundante escasez de datos, poco puedo decir respecto a la que viene siendo la 2ª santa latinoamericana, después de Santa Rosa de Lima. Pero esta 2ª  santa, jamás llevada a los altares por el Vaticano, pues su proceso desde hace 3 siglos se estancó y quedó detenido en eso de “murió en olor a santidad”. Detalle por lo demás insignificante para el fervor popular, especialmente el vicentino de aquellos tiempos, puesto que Ana Guerra de Jesús nació en San Vicente durante el mero periodo colonial. Lo que oficialmente se sabe de ella lo escribió un jesuita, su confesor, que se constituyó en su biografía que ha sido publicada como libro impreso, incluso recientemente y que recoge la 1ª edición reproducida en facsímile.

Comparto con ella, la santa sin canonización oficial ni beatificación ni nada, una coincidencia, que se puede considerar cósmica y... es el haber sido yo, engendrada y nacida a esta vida en la casa en San Vicente, que ella habitó por varios años, desde su noche de bodas con el mayoral Diego Hernández Vicente... dicha casa, ni con el gran evento telúrico de diciembre de 1936 que le derribó parte de su magnificencia arquitectónica, perdió la magia de su hermosura colonial y espléndida elegancia, con reminiscencias moras y que a cuadra y media de la Plaza Mayor, aún emitía resabios ejemplificantes de los esplendores de las glorias y poderes republicanos de la ciudad, cuando fue capital federal de las Provincias Unidas del Centro de América, utópico estado, nacido de la debacle del poder colonial de la corona española en toda la Capitanía General de Guatemala, de donde surgieron Guatemala, Honduras, El Salvador, Nicaragua y Costa Rica que ahora son 4 repúblicas bananeras y la otra cafetalera...

La desgracia de este pueblo no ha sido la violencia telúrica de su geografía sino la desidia humana, causa y origen de las ruinas materiales y morales.

Ana Guerra de Jesús, en estos tiempos sería una luchadora social, probablemente comunista, abanderada de los justos derechos de las mujeres y de las mayorías desprotegidas.

 

Prudencia Ayala me acompaña, desde mi entrada a la edad de la razón, como la virtud que encierra su nombre y que nunca fue blasón de su carácter, siempre al borde de la imprudencia desafiante y contestataria. Cualidad que la condujo, después de ser la 1ª mujer en aspirar a la candidatura presidencial de la joven república, a terminar su camino terrenal, ejerciendo de entre varios oficios, el de agorera profesional en San Salvador. Oficio que ejercía, cubierta de resplandecientes pedacitos de culos verdes de botellas vítreas, engarzados en plata mexicana en son de simular joyas costosas y pintada con afeites tal hetaira babilónica que, le dieron a su piel de cobre una palidez de muerte para contrastar y recalcar su precursora grandeza de mujer emancipada y de exótica belleza indígena tropical (probablemente nahua-pipil), a principios de un siglo XX pletórico de luces y oscurantismos medievales en un país(ito) oscuro, absurdo e irreal y por las complicidades con los déspotas de turno, abrumador en exceso salarrueriano.

Por pura perspicacia intelectual, que los tontos llaman intuición femenina, Prudencia Ayala no entabló mayor amistad, me imagino no más allá de los saludos protocolarios, con nuestro gran “coseno, obsceno, oscuro y tangencial” Salarrué, pese a compartir ciertos conocimientos esotérico-astrales y al grado que lo nombraba y llamaba don Payín. Con una diferencia sustancial entre ambos: que Prudencia utilizaba tales conocimientos para ejercer el oficio de agorera con el que enfrentó su vejez.

Prudencia Ayala fue precandidata a la presidencia de la república, cuando en el país(ito) las mujeres eran consideradas cosas u objetos sexuales, consideración que Salarrué aceptaba y de ahí su personaje Gnarda. No eran personas pues ni documento de identidad ni de vecindad se les proporcionaba y no tenían derecho al sufragio. A las mujeres, en el país(ito), se les concedió el derecho al voto en 1954.

Prudencia adquirió así un valor sin precio de cambio hasta la consumación de los siglos, los años, los meses, las semanas, los días y las horas... igual le llegó la grandeza eterna y sin fin a las otras Divas, aunque por disímiles méritos y caminos...

Yo sí puede decir que he sido prudente, aunque de una prudencia muy especial y bastante limitada.

 

Debo agregar que lo expresado, no lleva o conlleva intenciones panegíricas pues no soy muy dada a alongar virtudes, incluso de los hombres que he amado y me han amado... y sin jactancias puede decir que han sido varios y variados... mi éxito en los deleites carnales seguramente sea porque nunca me negué un polvito mañanero con el impetuoso galán que me acompañaba… entero lo fijaba en la memoria completamente chuloncito y así la jornada del día, la pasaba con una sonrisa media luna hasta volverlo a desnudar en los inicios de la noche, con o sin estrellas, pero sí con estertores amatorios… ¡las cosas que las mujeres sabemos del amor, los hombres ni las sueñan ni las imaginan!... por eso inventan guerras y revoluciones y golpes de estado y asonadas político-militares y escaramuzas represivas... a nosotras (desde luego me refiero a las inteligentes) nos basta con un requiebro de ojos para derrocar tiranos, para sitiar ciudades, para derrotar enemigos... pero... ¡qué hay mujeres tontas!... hay mujeres tontas... tan tontas que parecen y actúan como hombres y no me refiero a esas con ondas lésbicas de cualquier clase con las que ocultan su confusión... las mujeres somos mujeres aun con pantalones de fatiga y botas militares y sin sombrilla ni maquillaje...

En horas de la madrugada no cedo al sueño perspectivas falsas... la heterodoxia onírica me acompaña, es mi dulce compañía que no me desampara ni de noche ni de día... de esos antros intersticiales del cerebro surge esto... y es mi poema absurdo que nunca tendré... es mi lamento tehuacano... éstos son mis maitines armoniosos... éstas son mis salmodias vitales... duele mucho recordar las penas del no estar, del morir por no morir y morir aquí es fácil... después de haber llegado casi al borde de perder la alegría de vivir, por el desliz de aceptar a la ligera, causas perdidas de antemano y abrazarlas con ardor... es un falso bienestar que ni las canas, sutilmente pintadas una a una, por cada dicha de amor experimentada, pueden ocultar...

 

 

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Luisfelipe Minhero.

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